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Los fillers faciales o rellenos, especialmente de labios, son los tratamientos que más piden las mujeres de todo el Mundo por su sencillez, eficacia y naturalidad de los resultados.
Muchas son las celebrities que se han hecho un relleno de labios y sirven de referencia para sus seguidoras. Estamos hablando por ejemplo de Ester Expósito, Bella Hadid y, por supuesto Jylie, Kris, Khloe y Kim del clan Kardashian.
Si ya te has decidido, o estás cerca de hacerlo, es importante que te informes todo lo posible antes del tratamiento. El realce de labios es una manera fantástica de mejorar la apariencia de tus labios y tu rostro en general, pero debes saber exactamente a qué te enfrentas y qué esperar.
- Hay diferentes tipos de rellenos labiales disponibles
- Dónde debo hacerme el tratamiento
- Son seguros y reversibles
- No se trata solo de hacerlos más grandes
- Los rellenos dérmicos no duran para siempre
- Hay riesgos involucrados
- Es recomendable preparar el cuerpo para el tratamiento
- No deberías sentirlos «extraño» después del tratamiento
- Es posible que no queden tan grandes como esperabas
- Precauciones tras el tratamiento
1.- Hay diferentes tipos de rellenos labiales
Los realces de labios se dividen básicamente en dos tipos: implantes quirúrgicos e inyecciones de labios no quirúrgicas. Los primeros son los llamados permanentes, contra los que hoy día advierten los profesionales de la salud, ya que son casi imposibles de eliminar.
Los segundos son los realizados con ácido hialurónico y existe una gran variedad y marcas como Merz, Teoxane, Juvederm…
Poro otro lado hace años, concretamente hasta el 2001, el colágeno era el principal ingrediente utilizado en los rellenos de labios. Desde la llegada del ácido hialurónico, su uso se ha reducido drásticamente, ya que el AH es una opción más segura y que, a diferencia del colágeno, aporta un efecto de relleno instantáneo.
2.- Dónde debo hacerme el tratamiento
En primer lugar es importante dejar claro que la Ley en España prohíbe la venta por Internet de medicamentos y productos sanitarios sujetos a prescripción médica por lo que sólo pueden adquirir y aplicar ácido hialurónico inyectable profesionales médicos formados para ello. A partir de ahí, debemos contar con un profesional experimentado y bien formado como la Doctora Montserrat Albarán Gómez de Artemédica en Murcia.
3.- Son seguros y reversibles
Si optas por la opción lógica, que son los rellenos de labios hechos con ácido hialurónico, debes saber que son reversibles. Podemos disolver el relleno con hialuronidasa, una enzima que funde los rellenos de ácido hialurónico de forma rápida y segura.
Lo normal es que no quieras revertir el relleno, pero es reconfortante saber que puedes disolver el relleno si no le gustan los resultados.
4.- No se trata solo de hacerlos más grandes
Algunas personas se ponen rellenos de labios para ayudar a dar forma y equilibrar sus labios. Por ejemplo, si el labio superior es mucho más delgado que el labio inferior, podemos rellenarlo para ayudar a igualarlos. O tal vez no tienes un «arco de Cupido» definido. Los rellenos pueden aportarte un labio superior definido y con curvas. O si tu labio superior muestra las encías, la llamada sonrisa gingival, rellenar ese labio puede hacer que tu sonrisa sea más uniforme.
5.- Los rellenos dérmicos no duran para siempre
No, no duran para siempre. Es probable que el efecto dure muchos meses, incluso mucho más de un año, pero después de este tiempo, notarás que tus labios vuelven a su tamaño normal y en ese momento es probable que quieras reservar una nueva cita para volver a tener una mejor apariencia.
Y sobre todo, no te preocupes. Según vaya disolviendo el relleno, tus labios no se convertirán en bolsas de piel flácidas y desinfladas. Es más, es un tratamiento que estimula la producción natural de colágeno por lo que tus labios habrán mejorado incluso cuando pasen los efectos del tratamiento.
6.- Hay riesgos involucrados
Los rellenos de labios conllevan riesgos mínimos en comparación con la cirugía, pero deben conocerse los riesgos antes de someterse a su tratamiento.
Estos riesgos pueden incluir hinchazón, hematomas, enrojecimiento y sangrado en el lugar de la inyección.
Como ya hemos comentado, sólo debes realizarte este tratamiento con un médico especializado para garantizar la seguridad.
7.- Es recomendable preparar el cuerpo para el tratamiento
Unos días antes del tratamiento conviene de evitar los anticoagulantes, ya que estos hacen que el área sea más propensa a hematomas y sangrado. Por tanto no hay que tomar analgésicos como la aspirina o el ibuprofeno. Tampoco conviene beber alcohol.
Si tienes antecedentes de herpes labial, te recomendamos tomar medicación preventiva dos días antes del procedimiento, ya que podría desencadenar un brote.
8.- No deberías sentirlos «extraños» después del tratamiento
Los primeros días después de recibir el relleno de labios, es posible que los tengas un poco enrojecidos, amoratados o hinchados. Una vez que el relleno se ha asentado y la hinchazón ha bajado, tus labios no deberían sentirse extraños. No deben presentar protuberancias. Debes sentirlos normales, simplemente más grandes.
Si te sientes incómoda o no estás tranquila, habla con el especialista que te atendió.
9.- Es posible que no queden tan grandes como esperabas
Muchas mujeres va a la consulta con fotografías de celebridades y esperan poder lograr un tamaño o forma similares. La realidad es que la forma y el tamaño que puedas lograr dependerán en gran medida del tamaño y la forma natural de tus labios. No es posible transformar totalmente su apariencia con rellenos… pero puede mejorarla mucho.
En cualquier caso, tómatelo con calma porque siempre puedes ponerte más relleno en la siguiente visita si quieres que tus labios sean más grandes.
10.- Precauciones tras el tratamiento
Durante al menos 24 horas, debes evitar actividades que aumenten el flujo sanguíneo a la cara, como recibir un masaje, un tratamiento facial o incluso ir al gimnasio, ya que esto puede aumentar la hinchazón.
Últimas consideraciones
- Los labios pueden rellenarse gradualmente, no hay prisa.
- El mantenimiento y el cuidado posterior son mínimos.
- No necesitarás ausentarse del trabajo, la recuperación es mínima.
- No duele demasiado, pero algunas personas pueden encontrarlo simplemente incómodo.
- La hinchazón es completamente normal en los primeros días.